En la mañana, el aroma se asoma, cálido abrazo que al alma reanima, bajo el sol tenue, el ritual se desploma, una danza de sabor que el día aproxima.
Negro como la noche, dulce como un verso, en cada gota, un secreto se esconde, con la cuchara revuelvo mi universo, y en la calma, la mente responde.
Granos tostados que cuentan su viaje, de tierras lejanas, de soles ardientes, cada trago es un puente, un bello paisaje, donde los sueños flotan, libres y valientes. Bendito café, compañero sincero, con tu fuerza y dulzura, mi día iluminas.
Buen fin de semana disfrutando un delicioso café
Raquel
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